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Vivo en una ciudad de pocas plazas, pocas calles con árboles y escaso silencio. Una ciudad ruidosa, de aire espeso y ahumado, en la que pocos tienen tiempo, y el tiempo sólo se mide por el reloj. Alguna vez esta fue una ciudad bella; en el tiempo en el que aún la amábamos. Ahora de todo eso queda poco, o casi nada; cada día hay menos parques y jardines, y más estacionamientos; menos casas viejas con viejos patios secretos, y más torres de vidrio y cemento; menos árboles, y más carteles y anuncios; más calles y semáforos; y menos veredas grandes, con bancos en las esquinas para los viejos y los paseantes. Pero yo tengo un perro. Y es por eso, tal vez, que cada tarde camino la ciudad a su paso, sin tiempo. Dejo atrás la prisa y me adentro en el espacio de los perros. Voy por las calles como un perro; miro el mundo con ojos de perro; llego hasta una plaza con perros; me acerco a otros que, como yo, vienen con sus perros; y hablamos de perros. Y el tiempo pasa, o no pasa -es igual- y la ciudad moderna y gris, la ruidosa ciudad de humo, se queda por un momento callada. Porque sólo un perro hace que una vereda sea algo más que un lugar de paso, y una esquina algo mejor que sólo el encuentro de dos calles. Y que esa plaza se vuelva, cada tarde, un inmenso jardín.
Todos los perritos fueron alguna vez mascotas, que tuvieron la mala suerte de tener amos irresponsables, ignorantes o simplemente más animales que ellos. La mayoría de los perros callejeros fueron sanos, felices y cariñosos, y sin tener nada malo los botaron como si fueran basura.
Recuerden que un perro es un ser vivo capaz de sentir dolor, frío, hambre y frustración al igual que nosotros. A diferencia de lo que mucha gente piensa, los perros no son animales exitosos en el mundo salvaje, ya que han condicionado su evolución a nosotros: son pésimos cazando y no tienen una buena tasa de supervivencia.
Según el proyecto de ley en Chile, un perro abandonado es aquella mascota que no tiene la vigilancia de una persona responsable de él o que deambula suelta sin su identificación. También se establece que el animal potencialmente peligroso, será todo animal que ha sido calificado como tal por una autoridad competente, según un reglamento señalado. En ese sentido, añadimos que "lo que estamos tratando de conciliar son los intereses particulares con los colectivos, por lo tanto, no es una tarea fácil. Hay un tema importante que es la tenencia irresponsable de animales y que ha generado problemas sanitarios y sociales, especialmente, con los perros abandonados".
Casi el 80% de las mordeduras, se producen por perros conocidos y como respuesta a una provocación, lo que indica que no sabemos tratar a nuestras mascotas. (Congreso Chileno de Pediatría, 2008).
El estudio del Dr. Espínola de la Universidad de Chile del 2006, indica que en Santiago había 80 mil perros completamente abandonados en la calle y 1.250.000 que tenían algún tipo de dueño (con hogar restringido, con hogar pero que callejean). No existen datos más actualizados, pero creemos que todas estas cifras han ido en aumento.
Dentro de las acciones que hay actualmente en nuestro país, para disminuir la tasa de crecimiento de perros abandonados, está la esterilización.
Es importante que las mascotas puedan operarse con Médicos Veterinarios capacitados, y las cirugías se realicen en lugares especializados donde las mascotas puedan recibir una atención de buena calidad. Aquí te entregamos algunos datos de municipalidades que brindan programas de esterilización:
Municipalidad de Santiago
La Dirección de Higiene Ambiental está aplicando su programa anual gratuito de vacunación antirrábica y de clínicas de esterilización de mascotas caninas y felinas en la comuna. Los vecinos que deseen esterilizar a sus mascotas deben comunicarse con Higiene Ambiental (Rosas 1783, teléfonos 698 71 73 y 698 73 52).
El plan contempla, además, intervenir sobre los animales abandonados en el Centro, los que serán retirados, esterilizados y entregados en adopción responsable.
Municipalidad de San Joaquín
La municipalidad mantiene una clínica veterinaria de atención primaria que cuenta con el apoyo de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Iberoamericana.
Atiende en calle Rivas N° 565, teléfono 555 76 50 de lunes a viernes de 9:30 a 13:00 horas y de 14:00 a 17:30 horas y los sábados de 9:00 a 14:00 horas.
Municipalidad de La Pintana
El departamento de salud ambiental tiene un programa de Tenencia Responsable con un centro de atención primaria de mascotas. En él se prestan servicios veterinarios a nivel de atención básica con un costo rebajado. Para acceder a este servicio se debe pedir hora en forma previa al teléfono 389 66 75.
Es importante confirmar los datos en cada municipalidad antes de que lleven sus mascotas a estos centros.
La gran mayoría de la población de dueños de perros y gatos que tienen una situación acomodada, no deberían llevar a sus mascotas a centros municipales para que sean esterilizados, sino que a las clínicas veterinarias. Es preferible dejar las municipalidades para la gente que realmente lo necesita y para los perros abandonados.
Ponemos el tema sobre la mesa para la discusión ¿Qué hacer con estos animales? ¿Quién se hace cargo? ¿Qué ocurre con la seguridad de los ciudadanos? ¿Qué ocurre con los derechos de los animales?.